JUJUY.- El Tribunal Oral Federal de Jujuy (TOF) condenó a la líder de la agrupación Tupac Amaru, Milagro Sala, a tres años de prisión, en suspenso, por encontrarla responsable del delito de daño agravado en calidad de instigadora. La causa se abrió luego de la agresión que sufrió el actual gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, cuando era senador nacional en 2009.
Los jueces también resolvieron condenar a los cooperativistas Graciela López a la pena de tres años y a Ramón Salvatierra a dos años, por ser los coautores de daños agravados en el mencionado escrache sucedido en el Consejo Profesional de Ciencias Económicas de Jujuy. Respecto del delito de amenazas, por el cual también se enjuiciaba a los acusados, el tribunal resolvió por unanimidad declarar extinguida la acción penal por prescripción y en consecuencia sobreseyó definitivamente a los tres imputados.
Si bien los jueces dejaron en suspenso el cumplimiento de la condena, los representantes del Ministerio Público Fiscal y los abogados defensores solicitaron que sea de cumplimiento condicional.
La lectura integral de la sentencia está prevista para el próximo 3 febrero, fecha en la que las partes conocerán los fundamentos de las resoluciones vertidas por los jueces, Mario Juárez Almaraz (presidente), María Alejandra Cataldi y Fernando Díaz.
Durante la audiencia, que se inició poco después de las 16, la jefa de la organización Tupac Amaru hizo uso de las palabras finales y se dirigió a los jueces y les reclamó: “no se dejen apretar por el poder político”. Y agregó: “dicten lo justo, no se dejen apretar por Morales”.
“Siento mucho dolor por la injusticia que estamos viviendo porque no hemos robado nada, hemos trabajado y hemos dignificado a miles de compañeros”, aseguró Sala. Agregó que ese fue su único pecado: “sólo queríamos igualdad en un país rico como este”.
Por último, Sala remarcó: “dignificar a los que menos tienen significó que hoy esté sentada en este sillón”.
La dirigente política es la principal referente del movimiento Tupac Amaru, una agrupación que en Jujuy llegó a tener más de 100.000 adherentes y recibió millonarios fondos del Estado para sus actividades sociales y la construcción de viviendas durante los gobiernos de Néstor Kirchner (2003-2007) y Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015). Muchas viviendas quedaron inconclusas aunque los dineros se habían pagado.
El primer juicio contra Sala se desarrolló en el fuero federal, con cuatro intensas audiencias por las que pasaron 26 testigos, quienes relataron los hechos sucedidos el 16 de octubre de 2009, cuando el entonces senador nacional Morales se disponía a brindar una charla sobre el control de los recursos del Estado.
El apoyo
La sala estaba colmada de integrantes de la Tupac Amaru, legisladores nacionales y activistas de Derechos Humanos. Se encontraban el ex secretario de Comercio, Guillermo Moreno, el diputado nacional Juan Cabandié, el padre Francisco Oliviera y la presidenta de Familiares de Desaparecidos y Detenidos, Lita Boitano, entre otros.
La dirigente social se encuentra detenida desde enero pasado, cuando encabezaba un acampe en la capital jujeña. Muchos organismos internacionales solicitaron al Gobierno nacional que libere a Sala.
Desde que comenzaron las audiencias hubo momentos de tensión entre las agrupaciones kirchneristas y la Policía. En uno de estos episodios, la diputada kirchnerista Mayra Mendoza fue agredida por las fuerzas de seguridad cuando intentaba entrar en la sala sin permiso. En otro video también se observó cómo el ex diputado de La Cámpora, Horacio Pietragalla, golpeaba a un uniformado en la cara. (Télam-Especial)